AMLO sobrevive en máximas fáciles y cortas: “ mi corazón no es bodega”, “soy dueño de mi silencio”, “lo que diga mi dedito”, “no mentir”…sin embargo ante su estado de salud precisamente se miente, se oculta con dolo. El presidente no goza de “cabal salud”, Amlo tuvo que ser trasladado de urgencia no en línea comercial ante su terca y mediática posición de la austeridad y negarse a viajar en aviones oficiales. Gozó del privilegio que le otorga el cargo para ser trasladado de inmediato custodiado por mandos militares, no así fue con su hijo Jóse Eamón y su familia ante el COVID, cierto no son iguales.
En contraste a las mentiras del vocero presidencial quienes fueron testigos del lamentable evento aseguran que: AMLO presenta: una hemiplagia derecha , por infarto cerebral izquierdo y quedó temporalmente sin flujo sanguíneo adecuado, presenta complicaciones cardiovasculares. Tiene afectada la movilidad de la mitad del cuerpo, por la hemipléjia, dañada la sensibilidad de parte del rostro, brazo, pierna, o ambos miembros de la mitad del cuerpo, podría presentar a corto plazo problemas con la visión, la capacidad auditiva, el habla y la capacidad de razonamiento.
Por lo pronto sería sujeto no a un tratamiento de 3 días como nos quieren hacer creer que él mismo escribió. La verdad es que requeriría terapia al menos 1 o 2 meses para estimular músculos rotadores internos, flexores y supinadores. Ante esto el gobierno no ha sido capaz de desmentir y como en ocasiones anteriores AMLO no ha videograbado un mensaje para tranquilidad de eso que odia: las instituciones. Por lo pronto en un ejercicio pragmático del poder, las cocholatas se ocupan más de su futuro que de la salud de AMLO.
Por lo penal el secretario de gobernación recibió el espaldarazo presidencial para que en estos momentos Adán sustituya temporalmente en el cargo al Ejecutivo Federal. Como primer reflejo la Secretaria de Relaciones Exteriores está considerando la cancelación de la cumbre del CELAC, en el calendario para los días 6 y 7 de mayo, en Cancún, debido a los problemas de salud del presidente. Hay quien estima que la confrontación con Estados Unidos y la mentira sobre la venta (remate) del avión presidencial. Resulta que la empresa hoy dueña de la aeronave está demandando al gobierno federal por la cantidad total del adeudo del arrendamiento vigente hasta el 2023 así como los carísimos gastos de hangares, salarios, combustible quemado, mantenimiento de interiores, fuselaje y motores y hangares entre otros.
Al parecer todo esto dejó de pagar el gobierno. Además de que la aeronave no se puede vendar a un precio inferior a su valor y menos a una Estado/Gobierno financiado por ilícitos como tráfico y comercio de drogas protegido por Rusia. El TP 01 no es propiedad del gobierno. No todo esto más multas y demandas la administración de AMLO tendría que pagar tres veces más de lo que pretende vender al avión además de que esta aeronave ya fue rifada, hubo dinero obtenido y ahora se remata lo que significa un timo. Voceros oficialistas señalan que AMLO tiene por tercera vez COVID y que en tres días regresará a sus actividades cuando los protocolos sanitarios de la Organización Mundial de la Salud indica un aislamiento de por lo menos 10 días y el uso obligado del cubrebocas.
El gobierno indica que fue contagiado “involuntariamente “ porque tiene interacción cotidiana con cientos de personas, pero nada indican a cuántos contagio el mandatario por su irresponsabilidad. El aviso/advertencia de Estados Unidos para detener las acciones de cárteles mexicanos y el falso espectáculo del avión presidencial no solamente coloca contra la pared al presidente sino que coloca en grave riesgo a su “movimiento” de una honestidad valiente superficial y falsa. De igual manera los datos espectaculares que espera de la ventaja electoral de sus protegida en el Estado de México no le da la tranquilidad de un triunfo anticipado. Y faltan que las autoridades de Estados Unidos abran expedientes nada gratos para el círculo familiar del presidente. “No mentir” pide, promete y asegura mlo. Pues que lo entiendan sus subalternos que caen en contradicciones y mentiras.