Hace casi una década, después de mi participación en su noticiario en ABC Radio, Carlos Ramos Padilla me invitó a replicar mis comentarios de corte económico y de negocios en el programa Va en Serio que conducía desde 7 años atrás en Canal 34. La barra de opinión de dicho canal de televisión -donde nació y se fortaleció Va en Serio-, necesita a alguien que explique de manera clara y sencilla, sin terminajos, lo que pasa en la economía del país.
Es fundamental que se hable de las consecuencias de una decisión empresarial o de gobierno y que los mexicanos entiendan las razones positivas o negativas de tal determinación. Esas más o menos fueron sus palabras.
El reto era formidable, porque Va en Serio ya gozaba de una acentuada penetración en el país y el sur de Estados Unidos, a donde llegaba la señal de la televisora, gracias a sus propios equipos de transmisión y también a los acuerdos que tenía con todas la cableras de la nación.
Va en Serio se convirtió en una plataforma de opinión acendrada y plural, que concentraba a los personajes más preclaros de la política, la cultura, el derecho y de las más diversas disciplinas y ciencias habidas y por haber.
Va en Serio y Carlos Ramos Padilla les abrieron la puerta a los temas económicos. Desde esa trinchera aprendí mucho. Hablé sin cortapisas, incluí opiniones que fueron incómodas para quienes sostenían presupuestalmente a lo que hoy se denomina Sistema Mexiquense de Medios Públicos, pero nunca fui llamado para participar en actos de censura o acallamiento.
Por ese espacio pasaron hombres de negocios de todos los niveles, dirigentes de cámaras empresariales, directivos de bancos nacionales y del exterior, así como mandos de gobierno del gabinete económico en turno, con excepción del actual porque nunca quisieron. Sería un despropósito intentar mencionarlos a todos sin el riesgo de olvidar el nombre de alguno de ellos. Con casi todos se estableció una relación estrecha, porque siempre predominó el respeto a su persona y sus opiniones.
En este trajín, en 2021 comenzamos también las transmisiones de Va en Serio en Mexiquense Radio, y con la misma emoción, tenor y tesón de años pasados revivimos nuestras tareas de informar, opinar y entretener a través de la palabra hablada.
Ofrezco disculpas a los lectores por escribir en primera persona, pero comprenderán que era necesario. La gratitud es la fuente de todas las bondades y el reconocimiento que nos debe validar como personas.
Con la llegada del gobierno de 4T al estado de México se cerró un ciclo, pero no tuvimos la oportunidad de despedirnos como mandan los cánones establecidos. Así que aprovecho por esta vía para enviar mi gratitud anticipada a todos ustedes que nos brindaron su atención y nos abrieron las puertas de sus hogares, oficinas, talleres y automóviles para escucharnos cada semana y también a quienes hasta aquí han tenido la paciencia por leerme.
Ahí les dejo la conseja, la moraleja, la frase pues -y para ello evoco a Amado Nervo