La lamentable historia de Culiacán no termina con la decisión de liberar a Ovidio Guzmán luego de que la ciudad fuera sitiada por el Cártel de Sinaloa. Los atracos, la intimidación y los secuestros han aumentando. Amlo se vio forzado a comentar, más no informar, sobre el secuestro de 66 personas. El gobernador Rubén Rocha Moya y el secretario de Seguridad Pública estatal, Gerardo Mérida Sánchez, han sido ofensivos con sus expresiones de que “son cosas que pasan”.
Fue a través del 911 que se reportó que grupos criminales estaban secuestrando “familias enteras”. Las autoridades se ausentaron y solo atinaron a gesticular que “se ha desplegado un operativo conjunto con el Ejército, la Guardia Nacional y la Marina. Aún con todo la madrugada del domingo se presentó un enfrentamiento entre “civiles” y elementos de la Guardia Nacional en el que uno de sus integrantes fue muerto y otro policía estatal herido: es una disputa entre El Mayo y Los Chapitos.
Frente a esto Amlo fue cuestionado en la mañanera y su respuesta más que vaga fue torpe, dijo “ no puedo informar mucho sobre esto por razones eeehhh obvias (sic)…decirles que se dieron eeeh estos secuestros, afortunadamente ya la mayoría eeehhh han sido rescatados o han regresado a sus casas mmm bien. Creo eeeeh fueron alrededor de 60, 66, y ya hay 58 localizados, faltan 8, eeeeh y se está eeeh trabajando en eso, ya se tiene la identidad de alguno de los 8 (sic), no hay afortunadamente menores de edad, y es una confrontación de bandas”.
Hasta aquí su señalamiento. Nada sobre los secuestradores, nada sobre detenciones, nada sobre la aplicación de la Ley, nada sobre la responsabilidad de los servidores públicos, es decir, nada de nada. 66 secuestrados y el presidente, entre balbuceos, solamente cree. Qué del ejército, que de la guardia nacional, que de los órganos de inteligencia, nada. Por qué la confrontación entre bandas? A qué se debe “calentar la plaza”?. Pero esta no es la única región del país en estas condiciones.
El bufete de abogados 1800 Migrante denuncio el plagio de 95 ecuatorianos en Chiapas. Los criminales asaltaron los vehículos en los que los migrantes pretendían trasladarse al norte para llegar a los Estados Unidos. Solamente se sabe que los secuestradores pidieron rescatar a los familiares, por lo demás nada está es la fotografía de la inseguridad que prevalece en el país, de la ignorancia del presidente, de las estrategias fallidas y de la intención de Sheinbaum por dar continuidad.