“Esta no es una reforma: es una embestida directa contra las libertades fundamentales: Manuel Añorve
Por Félix Muñiz
En un momento clave para la defensa de los derechos digitales y la libertad de expresión en México, la bancada del PRI en el Senado cerró filas para rechazar de forma contundente la llamada “Ley Censura”, una iniciativa que pretende reformar el marco legal en materia de Telecomunicaciones y Radiodifusión.
Con la conclusión del quinto conversatorio especializado sobre el tema, el coordinador de los senadores del PRI, Manuel Añorve Baños, reiteró el posicionamiento del partido: “No estamos de acuerdo ni ahora ni nunca con una ley que legaliza la censura, vulnera derechos fundamentales y concentra el poder en una sola voz”.
La reforma ha generado fuertes críticas por parte de especialistas, académicos, defensores de derechos humanos y organizaciones civiles.
Esto lo atestigua lo discutido en los conversatorios, la propuesta vulnera pilares esenciales del Estado de Derecho, como el acceso a la información, la privacidad de los usuarios y la libertad de expresión.
“Esta no es una reforma: es una embestida directa contra las libertades fundamentales. Lo dijeron los expertos y lo decimos nosotros: esta iniciativa no tiene cabida en una democracia moderna”, advirtió el legislador priista Manuel Añorve.
El dictamen permite bloqueos de señales y plataformas sin orden judicial, y la retención de datos personales durante 24 meses, sin protección legal ni justificación técnica. Además, contempla la creación de un padrón nacional de usuarios sin salvaguardas. “Quieren espiar, callar y castigar. Esa es la lógica de esta ley. Y como tal, la combatiremos”, sentenció el senador guerrerense.
El PRI recordó que los derechos de las audiencias no son opcionales, sino garantías reconocidas por la ley. La reforma pretende reducirlos a simples recomendaciones sin carácter obligatorio, contradiciendo incluso precedentes judiciales como el amparo de 2022 ganado por la Asociación Mexicana de Defensorías.
“No permitiremos que los avances logrados se borren de un plumazo. Las audiencias ya no son espectadores pasivos. Son sujetos de derecho. Y vamos a defenderlos”, declaró Añorve.
El PRI también denunció la intención de centralizar el control de medios y plataformas en una sola agencia, sin contrapesos ni órganos colegiados. Además, criticaron la intención de imponer criterios arbitrarios para diferenciar entre “opinión” e “información”, lo cual puede utilizarse para castigar a medios incómodos o críticos.
“No vamos a acompañar una reforma que ponga en riesgo la democracia informativa ni que convierta la crítica en delito. Esta ley es un retroceso y como tal, debe ser rechazada”, afirmó el legislador.
Finalmente, el PRI hizo un llamado a construir un modelo de comunicación digital acorde a la realidad actual, que reconozca a los ciudadanos no solo como audiencias, sino como usuarios, productores y consumidores de contenido.
“Esta iniciativa está atrapada en el pasado. México necesita una visión moderna, con un enfoque de derechos, libertad y participación. Por eso decimos: así no. Nunca”, concluyó Añorve Baños.