Cuauhtémoc Cárdenas: Un Demócrata Incansable: UNAM
Por Félix Muñiz
En un emotivo homenaje organizado por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano fue celebrado como un ícono indiscutible de la lucha por la democracia en México. Pero, más allá de los elogios y reconocimientos, ¿qué tan democrático es realmente México en la actualidad?
El Primer Jefe de Gobierno del Distrito Federal (hoy la Ciudad de México) Cuauhtémoc Cárdenas Solorzano, una figura destacada en la política mexicana, ha sido aclamado por su incansable defensa de los valores democráticos.
Su contribución, desde la creación de la corriente democrática hasta su participación en las elecciones presidenciales de 1988 y la fundación del Partido de la Revolución Democrática (PRD), ha dejado una marca indeleble en la historia política del país.
Pero, ¿han sido suficientes estos esfuerzos para transformar a México en una verdadera democracia?
En su discurso y ante el Rector de la UNAM Leonardo Lomelí Vanegas, el ex gobernador de Michoacán Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano destacó los avances significativos que ha experimentado México en términos de democracia en las últimas décadas.
Sin embargo, también reconoció los desafíos persistentes que obstaculizan el camino hacia una democracia plena.
El rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, enfatizó la importancia de seguir defendiendo los valores democráticos en un contexto global donde la confianza en las instituciones democráticas está en declive.
Y se cuestionó, ¿cómo puede México consolidar su democracia en medio de este panorama desafiante?
Es fundamental reconocer que la democracia va más allá de la mera celebración de elecciones periódicas. Requiere de instituciones fuertes, una prensa libre, un sistema judicial independiente y una participación ciudadana activa. Aunque Cárdenas Solórzano ha sido un defensor de estos principios, el país aún enfrenta desafíos significativos en estas áreas.
Además, es crucial abordar la creciente desigualdad socioeconómica y la corrupción endémica que socavan la legitimidad del sistema político. Aunque Cárdenas Solórzano ha abogado por reformas sociales y económicas, estas medidas deben implementarse de manera efectiva y transparente para lograr un verdadero cambio.
Antes, el profesor emérito de la Facultad de Economía y coordinador del Grupo Nuevo Curso de Desarrollo, Rolando Cordera Campos, comentó que Cuauhtémoc Cárdenas es un mexicano ejemplar quien, al lado de su padre, el general y presidente Lázaro Cárdenas, siempre ha participado en acciones a favor de que México transite hacia una sociedad cada vez más democrática y justa.
Es también un referente ineludible en cualquier análisis sobre nuestra democracia, desde las jornadas del 68, la insurgencia sindical de los años 70 y la larga marcha emprendida por hacer de México un país de Derecho y de derechos.
En última instancia, el legado de Cuauhtémoc Cárdenas debe ser un recordatorio de que la lucha por la democracia es un proceso continuo y que todos los mexicanos tienen un papel que desempeñar en la construcción de un país más justo, libre y democrático.
Es fundamental recordar que, a pesar de los logros alcanzados, aún persisten graves problemas, como la impunidad en casos de violaciones a los derechos humanos, mencionando más de 800 muertos en distintas jornadas desde 1988 cuyos crímenes siguen impunes.
Más allá de los elogios y reconocimientos, es hora de pasar de las palabras a la acción y trabajar juntos para hacer realidad el ideal democrático en México.