Por mayoría calificada de 347 votos a favor, 128 en contra y cero abstenciones
Por Félix Muñiz
En una sesión maratónica, la Cámara de Diputados aprobó este miércoles por la noche, con 347 votos a favor y 128 en contra, la iniciativa para desaparecer siete organismos autónomos, entre los cuales se destacan el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai), el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece).
La propuesta fue impulsada principalmente por la bancada de Morena y sus aliados, quienes argumentan que se busca una “simplificación orgánica” en la administración pública.
Con la aprobación de esta reforma, las funciones de estos organismos serían absorbidas por diversas dependencias del gobierno federal, lo que implica una reorganización sustancial en varias áreas clave. Entre las instituciones que tomarían las competencias de los organismos eliminados se encuentran la Secretaría de Energía (Sener), la Secretaría de Economía, la Secretaría de Educación Pública (SEP) y la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT).
Cambios clave en la administración pública
Algunos de los cambios más destacados de la propuesta incluyen la absorción del Sistema Nacional de Mejora Continua de la Educación por parte de la SEP, así como la integración de las funciones del Coneval en el Inegi, lo que incluiría la medición de la pobreza y la evaluación de políticas sociales. También se contempla que las facultades de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) y la Comisión Reguladora de Energía (CRE) sean asumidas por el Ejecutivo en lo que respecta al sector energético.
El gobierno federal ha señalado que la medida permitirá una mayor eficiencia en la administración pública, eliminando duplicidades y centralizando funciones para mejorar la toma de decisiones. Sin embargo, la propuesta ha generado una fuerte controversia en la oposición, quienes consideran que la eliminación de estos organismos es un golpe a la autonomía y los contrapesos democráticos, pilares fundamentales en cualquier sistema democrático.
Reacciones de la oposición
Durante la discusión, varios legisladores de la oposición expresaron su rechazo a la iniciativa. La diputada Anayeli Muñoz, del Movimiento Ciudadano (MC), fue una de las voces más críticas y advirtió que los cambios propuestos concentran aún más poder en el Ejecutivo Federal. “Estos cambios concentran aún más poder en el Ejecutivo Federal, debilitando la transparencia y la competencia económica”, declaró Muñoz, quien resaltó que la eliminación de organismos como el Inai y el IFT comprometería la transparencia y el acceso a la información pública.
Por su parte, el Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido Revolucionario Institucional (PRI) también se manifestaron en contra, argumentando que la desaparición de estos organismos representa una regresión en materia de derechos humanos y democracia. Los opositores aseguran que este tipo de reformas pone en peligro los principios de separación de poderes y la autonomía de los órganos encargados de regular sectores clave de la economía y la sociedad.
Próximos pasos para la aprobación
El dictamen aprobado en lo general deberá ser discutido en lo particular este jueves, y, de ser ratificado, pasará al Senado de la República para su aprobación. En caso de ser avalado por el Senado, la reforma deberá ser aprobada por al menos 17 de los 32 congresos estatales para ser considerada constitucional. Finalmente, si obtiene el visto bueno en todos los niveles, la reforma será publicada en el Diario Oficial de la Federación y entrará en vigor como ley.
La propuesta continuará siendo un tema de debate, con implicaciones significativas para la estructura del gobierno y los mecanismos de control en el país, lo que sin duda marcará un antes y un después en la administración pública de México.