La reforma busca visibilizar a las infancias afectadas por feminicidio y garantizarles atención como víctimas directas
Por Félix Muñiz
En un paso importante hacia la visibilización y atención integral de las víctimas colaterales del feminicidio, la bancada del PRI en el Senado, coordinada por Manuel Añorve Baños, presentó un punto de acuerdo para que las niñas y niños huérfanos por feminicidio sean incluidos en el Registro Nacional de Delitos contra Mujeres.
La propuesta legislativa busca reformar la fracción IX del artículo 47 de la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, con el objetivo de que el registro oficial contemple de forma obligatoria y explícita a las infancias afectadas directamente por estos crímenes. Actualmente, la ley establece la creación de un registro sistemático por parte de la Fiscalía General de la República, pero no considera a los menores de edad que quedan en situación de orfandad como consecuencia directa del feminicidio de sus madres.
“Esta omisión invisibiliza a miles de niñas y niños, impide una atención integral, y representa una deuda del Estado mexicano con las víctimas más vulnerables de la violencia feminicida”, declaró el senador Añorve Baños. La iniciativa busca que esta información sea homologada con el Registro Nacional de Víctimas, conforme al artículo 104 de la Ley General de Víctimas, con el fin de establecer criterios claros para la atención, seguimiento y reparación del daño.
El documento presentado por el PRI destaca la dispersión alarmante de datos entre instituciones. Mientras las fiscalías estatales reportan 2,625 niñas y niños huérfanos por feminicidio entre 2021 y 2024, el Sistema Nacional DIF solo reconoce 213 casos, y las comisiones estatales de atención a víctimas contabilizan 2,452. Esta falta de un padrón nacional unificado limita gravemente la posibilidad de ofrecer medidas de protección, atención psicosocial, apoyos económicos y acceso efectivo a la justicia para estos menores.
Desde 2021, existe un protocolo oficial para la atención de niñas, niños y adolescentes en situación de orfandad por feminicidio. Sin embargo, su implementación ha sido inconsistente y poco coordinada, lo cual subraya la necesidad de contar con información clara, actualizada y centralizada, que sirva como base para políticas públicas eficaces y acciones interinstitucionales.
El punto de acuerdo también subraya que visibilizar a estos menores es el primer paso hacia una verdadera reparación integral del daño. Además, permitirá diseñar acciones educativas, de salud mental y de apoyo económico enfocadas en el bienestar y el desarrollo de niñas y niños que enfrentan una forma extrema de violencia estructural.
Esta propuesta representa una contribución concreta del PRI a la construcción de un marco legal más justo, sensible y orientado a la niñez, en un contexto nacional donde el feminicidio sigue cobrando vidas y dejando secuelas profundas en las familias mexicanas.
Con esta iniciativa, el PRI reafirma su compromiso con los derechos humanos, la infancia y la erradicación de la violencia de género, impulsando un cambio legislativo necesario para que ningún niño o niña huérfano por feminicidio quede fuera de las estadísticas, ni del amparo del Estado.