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Relacionan el consumo de drogas con los trastornos mentales

El consumo de drogas con frecuencia coexiste con otras enfermedades mentales, se conoce como patología dual o comorbilidad

Por: Redacción PA

En el marco del XXVIII Congreso Nacional APM del Consejo Mexicano de Psiquiatría, el  consejero en adicciones Adrián Izar, de Grupo Punto de Partida, indicó que existe  una relación importante entre las personas que desarrollan trastornos mentales por uso de sustancias psicoactivas y viceversa, la cual es conocida como patología dual o comorbilidad.

Expresó que  estudios  indican que los adolescentes con trastornos por abuso de sustancias tóxicas también tienen altas tasas de enfermedades mentales, como ansiedad generalizada, trastornos de pánico o el de estrés postraumático, depresión o trastorno bipolar, según datos del Informe de Investigación sobre Comorbilidades Comunes con Trastornos por Uso de Sustancias de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos.

Durante la presentación de Grupo Partida, en la que se dio a conocer la apertura nueva clínica orientada a la Atención de Trastornos del Afecto con énfasis en Depresión y Trastorno Bipolar, Adrián Izar, destacó que uno de los principales desafíos que enfrenta México es la falta de profesionales de la salud mental en las instituciones públicas. “Los pacientes tienen derecho a la atención universal igualitaria y equitativa, el problema es que no se cuenta con el personal suficiente ni los espacios adecuados”.

Enfatizó que las instituciones de salud pública están rebasadas en atención a pacientes y urgió la necesidad de informar a la población acerca de temas como la depresión, la ansiedad, los trastornos de sueño y el suicidio que, en los últimos años, se ha agravado en México.

Información del Plan de Acción Integral sobre Salud Mental 2013-2030 arroja que los sistemas de salud no han dado una respuesta adecuada a la carga de trastornos mentales, por ejemplo, en los países de ingresos bajos y medios, entre un 76% y un 85% de las personas con trastornos mentales graves no recibe tratamiento; sin embargo, en los países con ingresos elevados la cifra oscila entre un 35% y un 50%.

Bajo el lema La Salud Mental es un Derecho Universal, este año la OPS y la OMS coinciden en que los países deben promover iniciativas regulatorias y normativas para apoyar la salud mental como un derecho humano universal; en esta coyuntura, Grupo Punto de Partida participó en el XXVIII Congreso Nacional APM “Psiquiatría y Compromiso Social” del Consejo Mexicano de Psiquiatría, A.C, en la ciudad de Guadalajara, Jalisco.

Drogas y salud mental

Se sabe que los trastornos por el uso de sustancias conllevan ciertos patrones de comportamiento, por ejemplo, la persona continúa consumiendo una sustancia (una droga recreativa) a pesar de experimentar problemas derivados de ello. En este contexto, las sustancias son diversas: alcohol, fármacos ansiolíticos y sedantes, marihuana, alucinógenos (como el LSD o el MDMA); inhalantes, opiáceos como el fentanilo, la morfina o la oxicodona, anfetaminas y cocaína, entre otros.

De acuerdo con la American Psychiatric Association el consumo repetido de sustancias puede provocar cambios en el funcionamiento del cerebro, los cuales pueden durar mucho tiempo después de que desaparecen los efectos inmediatos de la sustancia o, en otras palabras, después del período de intoxicación. La intoxicación es el placer intenso, la euforia, la calma, el aumento de la percepción y los sentidos y otros sentimientos que son provocados por la sustancia.

Las personas con consumo de sustancias y adicciones pueden ser conscientes de su problema, pero no ser capaces de dejarlo, aunque quieran y lo intenten. La adicción causa problemas físicos y psicológicos, así como problemas interpersonales, como con familiares y amigos o en el trabajo.

En el caso de los trastornos mentales es importante mencionar que se han logrado avances significativos en el tratamiento. Actualmente, es posible tratar muchos trastornos psiquiátricos con gran éxito con terapias personalizadas.

Los tratamientos (según el diagnóstico de cada paciente) incluyen fármacos, terapia electroconvulsiva y otros métodos, como la estimulación magnética transcraneal, además de la psicoterapia individual, grupal o familiar y conyugal, o bien por medio de técnicas de terapia conductual

 

 

 

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