Se salda una deuda histórica, ya que se reconoce su capacidad de toma de decisiones en pleno respeto a nuestras culturas e identidades: Edith López
Por Félix Muñiz
Las comisiones unidas de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos del Senado de la República han aprobado por unanimidad un dictamen que modifica el artículo 2° de la Constitución Política de México. Esta reforma tiene como objetivo reconocer los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos, marcando un paso significativo en la inclusión y protección de sus identidades y culturas.
El dictamen establece que los pueblos y comunidades indígenas serán considerados sujetos de derecho público, lo que les otorgará personalidad jurídica y patrimonio propio. Además, se presta especial atención a los derechos de niñas, niños, adolescentes y jóvenes dentro de estas comunidades, subrayando la importancia de su protección y bienestar.
Los senadores de diferentes partidos políticos expresaron sus posturas sobre esta histórica iniciativa.
La senadora de Morena, Edith López Hernández, de origen indígena, destacó la larga lucha por el reconocimiento de sus derechos. “Han sido décadas de lucha para ser escuchados. Con esta reforma, se salda una deuda histórica, reconociendo nuestra capacidad de toma de decisiones y respeto a nuestras culturas e identidades,” señaló, enfatizando la necesidad de superar el olvido y la represión que han padecido sus comunidades.
Por su parte, el senador Ricardo Anaya del Partido Acción Nacional (PAN), subrayó que, aunque la reforma es un avance, los verdaderos retos radican en su implementación. Mencionó estadísticas preocupantes sobre la educación y la pobreza en las comunidades indígenas. “La escolaridad promedio en la población indígena es de seis años, y el analfabetismo alcanza el 20%. Necesitamos acciones afirmativas para cambiar esta realidad,” argumentó Anaya.
Luis Donaldo Colosio Riojas, senador de Movimiento Ciudadano, también se pronunció a favor de la reforma, destacando su propósito de hacer justicia y visibilizar las necesidades de las comunidades indígenas y afromexicanas.
“Buscamos un trato diferenciado que garantice el acceso pleno a sus derechos individuales y colectivos,” afirmó, resaltando la importancia de reconocer la diversidad cultural del país.
El senador Néstor Camarillo Medina del Partido Revolucionario Institucional (PRI) añadió que esta reforma no se limita a ser un texto legal, sino un reconocimiento sincero a la riqueza cultural de México. “Estamos reafirmando su derecho a la libre determinación y a decidir su futuro, respetando sus costumbres y sistemas normativos,” indicó, enfatizando la necesidad de que sus voces sean escuchadas en las decisiones que les afectan.
La reforma también contempla varios derechos específicos, incluyendo la preservación de sus culturas y lenguas, el desarrollo de la medicina tradicional, y el derecho a ser consultados antes de adoptar medidas que puedan impactar sus vidas o entornos. Asimismo, establece que las autoridades deben asignar partidas presupuestales específicas para el apoyo de los pueblos y comunidades indígenas, garantizando su participación en la administración de recursos.
El dictamen se turnó a la Mesa Directiva del Senado para ser discutido por el pleno en la sesión programada para este martes. La aprobación de esta reforma es vista como un paso crucial hacia la equidad y el reconocimiento de los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos, en un contexto donde la justicia social y la diversidad cultural son más relevantes que nunca.