Esta en la Cámara de Diputados aclarar las inconsistencias que tiene la iniciativa para disponer de las afores
Por Félix Muñiz
La Secretaría de Gobernación Luisa María Alcalde, ha lanzado una advertencia urgente a la ciudadanía: no caigan en la trampa de la desinformación y la manipulación promovida por una campaña negra en contra de la ley en materia de pensiones.
Detrás de esta campaña se esconde una amenaza directa a los derechos y el bienestar de los trabajadores mexicanos.
La situación es alarmante: las Administradoras de Fondos para el Retiro (afores) administran más de 6 billones de pesos en cuentas de ahorro, pero un alarmante 0.4 por ciento de estos recursos lleva abandonado más de 10 años.
A pesar de que la ley es clara en cuanto a la inalienabilidad de estos fondos, las afores apenas han transferido el dos por ciento de estos recursos al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), reteniendo el resto de manera injustificada.
La iniciativa de reforma que se propone, la creación del Fondo de Pensiones para el Bienestar, parece una solución prometedora a primera vista. Sin embargo, tras un análisis más detenido, se revela como una maniobra peligrosa que pone en riesgo los derechos adquiridos de los trabajadores.
Esta reforma, próxima a ser discutida en el pleno de la Cámara de Diputados, plantea transferir estos recursos a un nuevo fondo sin cobro de comisiones y con la posibilidad de reclamarlos en cualquier momento. Sin embargo, esta propuesta esconde una realidad más siniestra: se trata de una tentativa de disponer de los fondos olvidados de los trabajadores para otros fines, bajo el pretexto de aumentar las pensiones y dignificar la vida de los trabajadores en su etapa de retiro.
La situación de las pensiones en México es crítica y requiere una respuesta urgente y efectiva. Sin embargo, esta reforma no es la solución adecuada. La historia reciente nos ha enseñado que las reformas previas, como la de 2020, si bien lograron aumentar las pensiones, resultaron insuficientes para garantizar un retiro digno para los trabajadores. La realidad es que las reformas anteriores han llevado a una disminución significativa en el monto de las pensiones, dejando a muchos trabajadores en una situación de vulnerabilidad económica.
Es evidente que se requieren cambios en el sistema de pensiones para asegurar un retiro digno para todos los trabajadores. Sin embargo, estos cambios deben ser cuidadosamente diseñados y basados en un análisis profundo de las necesidades y derechos de los trabajadores. La propuesta actual pone en peligro estos derechos y no ofrece una solución real a los problemas del sistema de pensiones en México.
En resumen, la ciudadanía debe estar alerta ante esta campaña negra y exigir que se respeten sus derechos y se tomen medidas adecuadas para garantizar un retiro digno para todos los trabajadores mexicanos. La reforma propuesta no es la solución y representa una amenaza directa a los derechos y el bienestar de los trabajadores.